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¿Qué es la dieta crudivegana?

La dieta o la alimentación crudivegana, se basan en la comida fresca, viva, raw food, o raw vegan, que es simple y sencillamente el hecho de consumir vegetales en su estado natural, es decir, sin ningún tipo de modificación ni cocción. Esta dieta incluye frutas, verduras, hortalizas, frutos secos, algas, germinados, alimentos deshidratados y todo aquello que no necesite una cocción para consumirlo.
Esta dieta, consiste principalmente en
dieta crudivegana
eliminar cualquier tipo de consumo de alimentos de origen animal ni sus derivados como lo son, los yogures, huevos, miel, leche, entre otros.
Beneficios de ser Crudivegano:

       Al más frutas y verduras en su cuerpo aumenta el consumo de fibra y por tanto la aparición de  nutrientes importantes, que en otras dietas no cubrimos del todo.
       Una persona crudivegana siempre variará sus comidas, con diferentes recetas, por lo limitado que a veces se encuentran.
       Son dietas efectivas para bajar de peso ya que se elimina la comida chatarra y los alimentos procesados, disminuyendo considerablemente la ingesta de calorías
       Como no consumen productos de origen animal, los niveles de colesterol se mantienen bajos, al igual que los triglicéridos, ayudando a prevenir enfermedades cardiovasculares y dislipidemias.
       Promueve un buen sistema inmunológico.
       Previene el envejecimiento.
       Evita el estreñimiento.
       Favorece la respuesta cerebral.
       Mejora los sentidos y las funciones renales.
       Mejora el sueño.



Desventajas de ser Crudivegano:

       Por sus restricciones, se pueden tener deficiencias de algunos nutrientes como la vitamina B12, encontrada en alimentos de origen animal.
       Aunque posee bajos niveles de colesterol malo, también podría bajar los niveles de colesterol bueno.
Alimentos permitidos en la Dieta Crudivegana:
       Proteínas: chía, alpiste, cáñamo, espirulina, germinados, chlorella, aguacate, brócoli, la col kale, espinacas, etc.
       Hierro: col kale, germinados, espinaca, remolacha, espirulina, chlorella, cacao crudo, cítricos, tomate, pimiento, etc.
       Calcio: sésamo, brotes de alfalfa, brócoli, almendras, etc.
       Ácidos grasos: almendras, aguacate, nueces, chía, lino, etc.
       Magnesio: semillas: calabaza, girasol, sésamo, almendras, nueces, acelgas, espinacas.
       Potasio: sésamo, nueces, plátanos,  acelgas, dátiles, etc.

Recomendaciones:
       No pasa nada si comes cocinado. Pero no sobrepases más del 30% de tu dieta con alimentos cocidos.
       Se aconseja hacer al menos 3 comidas al día con unas 700/800 calorías.
       Come variado teniendo estricta atención al aporte nutricional de los alimentos.
       Si sales a cenar, asegúrate de llenar un poco tu estomago, así podrás pedir ensaladas y zumos de frutas.

       Practica la actividad física.
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